El terrible motivo por el que Alice Glass dejó Crystal Castles.

Alice Glass ya nos había comentado que sufrió una relación tóxica y abusiva durante años, cuando publicó su primer tema en solitario "Stillbirth" sobre el cual publiqué una entrada que podéis ver AQUÍ.

Hace poco también publiqué una entrada con su primer EP en solitario "Alice Glass", que incluye un primer single y videoclip, podéis verla AQUÍ.

A través de Twitter, Alice publicó recientemente un tweet que lleva a su web oficial donde nos cuenta su historia detallando lo que sufrió y dando el nombre de quien abusó de ella, física y psicológicamente; explicando que ese fue el verdadero motivo por el que dejó el proyecto Crystal Castles.

TRADUCCIÓN DE LA DECLARACIÓN DE ALICE GLASS (http://www.alice-glass.com/cc/):

"Algunos sabéis que me he abierto sobre mis experiencias con el abuso en el pasado. He sido muy cautelosa sobre la información que he dado y no he dado nombres públicamente, porque he tenido miedo. He sido amenazada y acosada y como resultado, por miedo, he sido silenciada.

El impulso que ha sido creado recientemente por muchas mujeres valientes que se han abierto sobre sus propias historias me ha inspirado para finalmente ser más directa, a cualquier costo. Ésto es para mi propia recuperación, para las otras mujeres que han estado, están o pueden estar en una situación similar con el hombre que abusó de mí durante años, y para aquellas relaciones abusivas que buscan detenerse y hablar.

Conocí a Ethan Kath (Claudio Palmieri) cuando estaba en 10º grado. La primera vez que se aprovechó de mí fue cuando tenía alrededor de 15 años. Él era 10 años mayor que yo. Entré en la parte trasera de su coche extremadamente intoxicada (de bebidas que él me había dado esa noche). No hablamos durante meses después de eso. Él hizo todo lo posible por encontrarme de nuevo, acechándome y conduciendo por mi instituto buscándome.

Me "rastreó" y me mostró los lugares por los que estaba pasando y finalmente volvimos a conectarnos. Era muy joven e ingenua y estaba en una posición comprometida en mi vida. Lo percibí como una estrella de rock local porque había visto a su banda "Kill Cheerleader" en la televisión. A muchas de mis amigas de la escena punk también "se/las habían aprovechado/abusado" hombres mucho mayores, por lo que para mí, era una situación que se había normalizado.

Claudio fue muy manipulador conmigo. Él descubrió mis inseguridades y las explotó: utilizó las cosas que aprendió sobre mí contra mí. Durante un periodo de muchos meses, él me dio drogas y alcohol y tuvo relaciones sexuales conmigo en una habitación abandonada en un apartamento que él consiguió. No siempre fue consensual y permaneció sobrio cuando estábamos juntos.

Cuando tenía 16 o 17 él me dio un CD de canciones y me pidió que escribiera y cantara sobre ellas. Llevé las canciones a casa y escribí letras y melodías y grabamos las pistas que me gustaron. Pero incluso con música, él creó un ambiente tóxico que a menudo sentía que tenía que aceptar. Mientras grabábamos nuestro primer EP, el ingeniero de sonido me acosaba sexualmente mientras estábamos en el estudio. Claudio se rió de mí y me presionó para que lo aceptara. Él llamó a nuestro primer single "Alice Practice" y dijo que mi voz era una prueba de sonido. Él inventó esa historia y le dijo a la prensa que era una grabación "accidental", disminuyendo intencionadamente mi papel en la creación. Era otra forma de menospreciarme y aprovechar mis inseguridades.

Poco después, fuimos invitados a hacer un tour por el Reino Unido. Me sentí abrumada por lo rápido que nos estaban pasando las cosas, y Claudio me convenció de abandonar el instituto a solo "2 créditos" de la graduación. A medida que comenzamos a llamar la atención, él comenzó a atacar abusiva y sistemáticamente mis inseguridades y controlando mi comportamiento: mis hábitos comiendo, a quién podía hablar, dónde podía ir, qué podía decir en público, qué me permitía llevar. Él me impidió hacer entrevistas o sesiones de fotos salvo que él tuviera el control de la situación. Nuestra fama creció en Crystal Castles, pero él no sintió que recibiera el reconocimiento que creía merecer. 

Se volvió físicamente abusivo. Él me sostuvo sobre unas escaleras y me amenazó con tirarme. Él me levantó sobre sus hombros y me tiró sobre el hormigón. Él tomó fotos de mis moretones y los publicó en linea. Traté de irme, y él juró que nunca volvería a suceder, que nunca volvería a abusar físicamente de mí. El abuso psicológico y emocional más severo tomó su lugar.

Él controló todo lo que hice. No se me permitió tener mi propio teléfono o mi propia tarjeta de crédito, decidió quienes eran mis amigos, leía mis emails, restringió mi acceso a las redes sociales, regularizó todo lo que comía. Me regañó y me gritó, diciéndome que yo era una broma, que todas las personas que venían a nuestros conciertos solo estaban interesadas en sus instrumentales y que yo estaba arruinando la banda. Él rompió las puertas de cristal de la ducha para asustarme, me encerró en las habitaciones. Me dijo que mi feminismo me hacía un objetivo para los violadores y que solo él podía protegerme. Me obligó a tener relaciones sexuales con él o, dijo que ya no me permitirían estar en la banda.

Yo estaba miserable y mis letras indirectamente hablaban del dolor y la opresión que estaba soportando. Pero como a veces sucede en las relaciones abusivas, su crueldad a menudo era seguida de bondad. Él era muy bueno manteniendo su terrible trato conmigo en privado. A veces era encantador, era hiperprotector y sobre todo, me encantaba la banda que teníamos juntos. Pero él a menudo me decía lo reemplazable que era. Incluso me dijo que estaba buscando activamente a alguien para reemplazarme. Me mantuvo insegura y nerviosa, y luego me dijo que era el único en el mundo que creía en mí. Él me dijo que éramos nosotros contra todos, porque todos los demás pensaban que yo era una perdedora, una broma, un payaso de baile sin talento. Yo le creí. Estuve suicida durante años.

Dejar Crystal Castles fue la decisión más difícil que he tomado, esa banda lo era todo para mí. Mi música, mis actuaciones y mis fans eran todo lo que tenía en el mundo. Dejé eso y empecé de nuevo no porque quisiera sino porque tenía que hacerlo. A pesar de lo difícil que era, sabía que irme era una de las mejores decisiones que había tomado. Me llevó años recuperarme de soportar casi una década de abuso, manipulación y control psicológico. Todavía estoy recuperándome."

Ethan Kath ha enviado a Pitchfork una respuesta a través de su abogado. 

"Estoy indignado y herido por las recientes declaraciones hechas por Alice sobre mí y nuestra anterior relación. Su historia es pura ficción y estoy consultando a mis abogados sobre mis opciones legales. Afortunadamente, hay muchos testigos que pueden y confirmarán que nunca abusé de Alice".

Crystal Castles (Ethan Kath y Edith Frances) han tenido que cancelar conciertos por lo ocurrido.

Una pena que quede tan manchada la historia de Crystal Castles.