Cuando me dispuse a ver por fin (hace ya un tiempo) esta película, tenía un poquito de temor, debido a algunos titulares que había leído sobre ella... se dijo que en el cine durante su proyección en el Festival Internacional de Toronto (Canadá) hubo una ambulancia porque su visionado había provocado algunos desmayos, y yo ya le tengo cierto "pánico/respeto" al cine "gore" "por culpa de Sky Ferreira" como os conté AQUÍ.
Está claro que hace años una película (con algunas escenas sin censurar), como El Exorcista, provocó cosas muy bestias en el público, y es entendible, teniendo en cuenta que depende de la época, la edad y la mentalidad se puede tener diferentes tipos de reacciones y sigue pasando lo mismo pero a otros niveles; porque cada vez es más complicado encontrar algo original, único, creativo... no es lo mismo ver una película sobre una posesión demoníaca por primera vez, que verla después de haber visto cientos de veces escenas de posesiones; no es lo mismo ver en una película a un psicópata asesinando libremente por la calle, por primera vez, que verlo después de haber visto eso en muchas otras ocasiones y lo mismo pasa con el vampirismo, el canibalismo o cualquier otra temática.
A estas alturas, resulta casi imposible sorprender en el cine. Hay que rebuscar en los rincones de todo el mundo a los directores más peculiares y/o surrealistas o irse al cine clásico, antiguo o pionero para encontrar películas que sorprendan, resulten originales/creativas o puedan ser catalogadas de innovadoras.
Siempre he pensado que crearse expectativas con una película es malísimo, porque si no cumple con lo que te esperas pues te llevas un chasco; pero resulta que yo en este caso prefería que no cumpliera ni superara las expectativas, porque me esperaba algo excesivamente repulsivo; pero también deseaba que no fuera para tanto para que me apeteciera verla más veces. Al final, después de verla me gustó especialmente por su fotografía, su música, sus interpretaciones y lo entretenida que resulta.
No me revolvió absolutamente nada el estómago, al contrario, curiosamente me parecían incluso muy artísticas y elegantes las escenas; por el conjunto de todo (la atmósfera, el ambiente, el color, el sonido y el tono/la forma de plasmarlo) me resultó realmente atractivo.
"Crudo" (Grave/Raw, 2016) es una película franco-belga (totalmente europea), dirigida por la directora francesa Julia Ducournau. Se trata de una adolescente "Justine" (Garance Marillier) que pertenece a una familia vegetariana (
En resumen, "Crudo" es un drama psicológico adolescente, visualmente atractivo, bañado de canibalismo, que en ocasiones parece rozar el humor negro y que por su duración, su fotografía y su música resulta muy fácil de digerir.
Nunca mejor dicho, se la puede considerar una película ¡muy apetecible!
está buenardo tu blog <3
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